Las 5 habilidades blandas más valoradas en 2025

Pero hay algo que la tecnología todavía no puede reemplazar: la capacidad humana de conectar, pensar de forma crítica, adaptarse y liderar con empatía.

En un mundo donde la Inteligencia Artificial hace cada vez más tareas, las habilidades blandas —esas que nos hacen profundamente humanos— son más importantes que nunca. La paradoja es clara: cuanto más avanza la tecnología, más valiosa se vuelve la parte humana del trabajo.

En esta nota te contamos cuáles son las 5 habilidades blandas clave en 2025, por qué la inteligencia artificial no puede reemplazarlas y cómo puedes desarrollarlas dentro de tu empresa sin necesidad de grandes presupuestos.

¿Qué son las habilidades blandas?

Las habilidades blandas, también conocidas como soft skills, son capacidades personales y sociales que nos ayudan a trabajar mejor con los demás, resolver problemas, adaptarnos a los cambios y gestionar emociones.

A diferencia de las habilidades técnicas (como manejar una herramienta digital o conocer un proceso), las habilidades blandas tienen más que ver con cómo nos relacionamos, cómo lideramos, cómo pensamos y cómo nos comunicamos.

Algunos ejemplos clave son:

• Empatía
• Comunicación efectiva
• Pensamiento crítico
• Adaptabilidad al cambio
• Inteligencia emocional
• Trabajo en equipo

Como dice la experta en inteligencia artificial Conxita Túnica:

“Las habilidades blandas no se enseñan en una clase de Excel, pero son las que marcan la diferencia en el trabajo en equipo, el liderazgo y la adaptabilidad al cambio.”

¿Por qué son más importantes que nunca en 2025?

La inteligencia artificial está transformando el trabajo. Pero aunque pueda automatizar procesos, no puede construir relaciones, negociar con empatía o liderar equipos diversos.

El trabajo remoto e híbrido, la convivencia de hasta cuatro generaciones en una misma empresa, la rapidez con la que cambian los negocios y la incertidumbre constante hacen que las habilidades técnicas no alcancen. Lo que marca la diferencia es el talento humano.

Según el World Economic Forum, más del 50% de los empleados necesitarán volver a capacitarse en los próximos años, y las habilidades más críticas no serán técnicas, sino humanas.

Además, el Informe de Aprendizaje en el Lugar de Trabajo 2024 de LinkedIn destaca que las habilidades blandas, como la comunicación y el liderazgo, siguen siendo fundamentales para el éxito organizacional.

En este contexto, las empresas que invierten en el desarrollo de habilidades blandas no solo mejoran el rendimiento de sus equipos, sino que también se posicionan mejor para enfrentar los desafíos del futuro.

Las 5 habilidades blandas más valoradas en 2025 (y por qué no pueden ser reemplazadas por la IA)

1. Pensamiento crítico y resolución de problemas

En un mundo lleno de información (¡y desinformación!), saber analizar, cuestionar y tomar decisiones acertadas es una habilidad vital.

El Foro Económico Mundial destaca el pensamiento crítico como una de las principales habilidades para los próximos años. Porque no se trata solo de “saber hacer”, sino de entender por qué lo hacemos y qué consecuencias tiene.

2. Comunicación interpersonal efectiva

Con tantos correos, chats y videollamadas, comunicarse de forma clara, empática y efectiva se volvió un superpoder.

No alcanza con tener la información: hay que saber transmitirla, escuchar, interpretar señales no verbales y lograr que las personas entiendan y se sientan entendidas.

La IA puede generar textos, pero no puede reemplazar la calidez, la intuición o la sensibilidad que se necesita para hablar con alguien de verdad.

3. Inteligencia emocional y empatía

Liderar personas no es solo dar instrucciones. Es saber leer el ambiente, gestionar emociones (propias y ajenas) y generar confianza.

La inteligencia emocional incluye habilidades como la empatía, la autoconciencia, el autocontrol y la capacidad de motivar a los demás. Según estudios del MIT, es algo que la inteligencia artificial no puede imitar ni enseñar con efectividad.

4. Mentalidad de crecimiento y aprendizaje continuo

En un entorno que cambia todo el tiempo, quienes siguen aprendiendo y adaptándose tienen una ventaja enorme.

Tener una “mentalidad de crecimiento” implica estar abierto a nuevas ideas, aceptar los errores como parte del proceso y tener la curiosidad necesaria para seguir desarrollándose constantemente.

5. Colaboración en equipos diversos

Hoy los equipos están formados por personas muy distintas entre sí: de diferentes edades, culturas, experiencias y formas de pensar. Saber trabajar en conjunto, respetar las diferencias y llegar a acuerdos es clave para que cualquier empresa funcione bien.

¿Cómo desarrollar estas habilidades blandas en tu empresa? Paso a paso

Las habilidades blandas no aparecen por arte de magia. Pero con un plan claro, se pueden entrenar y fortalecer dentro de cualquier equipo, sin importar el tamaño o el presupuesto de tu empresa.

Aquí te compartimos una guía simple para empezar:

1. Evaluar dónde están hoy

Antes de capacitar, hay que saber dónde están los equipos parados. ¿Qué habilidades ya tienen? ¿Cuáles faltan? ¿Qué desafíos enfrentan?

Puedes hacer encuestas, entrevistas o incluso revisar qué capacitaciones se hicieron en el último tiempo. Una buena idea es armar una matriz de formación, que muestre por área o por persona qué se ha entrenado y qué queda pendiente.

2. Definir prioridades según el negocio

Una vez que entiendes el punto de partida, es momento de preguntarte: ¿cuáles son las habilidades más urgentes para mi organización en este momento?

No todas las empresas tienen las mismas necesidades. Si estás recibiendo malas calificaciones en atención al cliente, tal vez tu foco debe estar en comunicación interpersonal. Si se viene un cambio organizacional importante, la prioridad podría ser liderazgo o trabajo en equipo.

3. Escuchar al equipo

También es importante entender qué quiere y necesita tu gente. ¿Qué temas les interesan? ¿En qué se sienten más inseguros? ¿Qué los motiva a mejorar?

Una breve encuesta interna puede darte datos clave. Además, mostrar interés genuino por el desarrollo del equipo fortalece el compromiso y la cultura de aprendizaje.

4. Diseñar un plan de formación efectivo

No todas las personas aprenden igual. Por eso, el plan de formación tiene que ser variado y accesible.

Podés combinar:

• Capacitaciones presenciales o virtuales
• Talleres prácticos
• E-learnings breves
• Videos
• Mentoring o coaching

La clave es que el contenido sea relevante, práctico y aplicable al trabajo diario.

5. Comunicarlo bien

Muchas veces los programas de formación fracasan porque los colaboradores ni siquiera saben que existen, o no entienden por qué deberían hacerlos.

Por eso, es clave comunicar con claridad:

• Qué habilidades se trabajarán
• Qué beneficios trae para cada persona
• Cómo aplicar lo aprendido en el trabajo

Una buena campaña interna puede marcar la diferencia entre un curso olvidado y un equipo comprometido.

6. Hacer seguimiento y medir avances

Una vez que empieza la capacitación, hay que seguir de cerca el proceso. 

Algunos indicadores útiles pueden ser:

• Participación por área
• Tasa de finalización de cursos
• Evaluaciones de satisfacción
• Cambios observables en el día a día

7. Evaluar impacto y ajustar

Finalmente, pregúntate: ¿Está funcionando? ¿Mejoró algo? ¿Qué podemos hacer mejor la próxima vez?

Haz encuestas post-capacitación, pedí feedback a líderes y analiza si hubo mejoras reales en el equipo.

¿Cómo Pluxee puede ayudarte a potenciar las habilidades de tu equipo?

Desarrollar habilidades blandas requiere más que capacitaciones: también hace falta un entorno que motive, reconozca y cuide a las personas.

En Pluxee ayudamos a las empresas a crear ese entorno, a través de soluciones que impulsan el bienestar integral, como:

• Pluxee Alimentación: una tarjeta de dinero electrónico que contribuye al bienestar físico y emocional de los colaboradores, promoviendo una alimentación más saludable y accesible, que impacta directamente en el rendimiento y la motivación.
• Pluxee Gift: tarjetas de regalo ideales para fechas especiales o reconocimientos puntuales, que permiten motivar al equipo de manera personalizada y significativa.
• Pluxee Educación: una tarjeta que brinda apoyo económico para la compra de útiles escolares al comienzo de clases, ayudando a las familias de los colaboradores a enfrentar ese momento con más tranquilidad.

Casos de éxito en América Latina

Algunas empresas de la región ya están apostando fuerte al desarrollo de habilidades humanas, con muy buenos resultados:

• Banco Santander (Chile): Implementó microentrenamientos virtuales sobre inteligencia emocional y trabajo en equipo. Resultado: la rotación de personal bajó un 15% en un año.
• Grupo Bimbo (Perú): Creó círculos de aprendizaje intergeneracional, lo que mejoró la innovación y la resolución de problemas en equipo.
• Mercado Libre (Uruguay): Ofrece formación continua y programas de mentoría inversa para fortalecer la mentalidad de crecimiento, consolidándose como una de las mejores empresas para trabajar en la región.

Conclusión: ¿estás preparado para el futuro?

La inteligencia artificial vino para quedarse. Y sí, es una aliada poderosa para automatizar procesos. Pero no puede reemplazar lo que solo las personas pueden hacer: liderar con empatía, resolver con creatividad, adaptarse al cambio, construir equipos y generar confianza.

Las habilidades blandas no son un “extra”, son el corazón de las organizaciones.

Desarrollarlas en tu empresa es una inversión que mejora los resultados, fortalece la cultura y te prepara mejor para el futuro.

¿Tu equipo ya está potenciando sus habilidades más humanas?

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